Darle una segunda vida a una de las pruebas pertenecientes a mi primera plancha de linóleo añadiendo un toque de color con las acuarelas no ha sido mala idea. Eso sí, no termino de decidir qué color de fondo podría poner esta copia.
La copia en blanco y negro probé a hacerla con una presión más elevada de lo habitual en el tórculo, lográndose de esta forma un negro mucho más intenso y aumentando la dureza simbólica. Lástima que se pierdan muchos pequeños detalles que sí se ven en la copia a color.